En
el año 2009 decidimos pagar los estudios de Sona, una
niña de Guinea-Bissau que por entonces tenía
11 años.
A
partir del curso 2015/16 pusimos en marcha un programa de
escolarización con el objetivo de sufragar los gastos
educativos de niñas procedentes de familias de muy
bajos recursos económicos residentes en Bissau, la
capital del país.
La
razón de que este programa vaya dirigido exclusivamente
a niñas y no a niños se debe a que las primeras,
por razones sociológicas, tienen muchísimas
menos posibilidades de acceder a la educación en la
mayor parte de los países pobres.
Durante el curso 2019/20 fueron un total de trece las niñas
y adolescentes que se beneficiaron de nuestro programa. Lamentablemente,
y a causa de la pandemia ocasionada por el Covid-19, las clases
fueron suspendidas en el mes de marzo y llegado septiembre
de 2020 no teníamos ninguna garantía respecto
a si se iniciaría o no el nuevo curso, por lo que nos
vimos obligados a suspender temporalmente el programa.
No
obstante, donde
sí tuvimos la certeza de que el curso se iba a reanudar
fue en la localidad de Nhacra, situada a 31 km de la capital.
Desde la maternidad local, con la que colaboramos satisfactoriamente
desde hace años, recibimos una petición de ayuda
para atender las necesidades educativas de Celestina, una
niña del municipio.
Celestina
nació el 15 de diciembre de 2004, por lo que acaba
de cumplir 6 años de edad. A los 2 años de vida
quedó huérfana de padre y madre ya que ambos
fallecieron a causa del HIV-SIDA, por lo que fue adoptada
por una mujer de la localidad que carece de medios para pagar
su escolarización. Conocedores de la situación,
hemos decidido cubrir todos los gastos educativos de Celestina
para el presente curso y los futuros.
Cualquier
persona que quiera apadrinar a una niña puede hacerlo.
Para ello deberá solicitarlo
poniéndose en contacto con la ONG vía e-mail
con el fin de que le facilitemos toda la información. |